Elías Yesid Aguilar, dirigente político de Medellín, acusó de matoneo el expresidente Álvaro Uribe y al partido Centro Democrático de sectario, regionalista y racista, y renunció a esa colectividad política.

El partido le aceptó la renuncia de inmediato. Curiosamente, en la carta de aceptación le advierten que “la falsificación, modificación o adulteración de este documento, habilitará al partido para iniciar las acciones jurídicas pertinentes por las infracciones del artículo 289 del Código Penal”.

La breve carta de renuncia, publicada en la cuenta de Aguilar en la red social X, dice: "Presento mi renuncia irrevocable al partido Centro Democrático, no puedo continuar después del boicot y el matoneo que el expresidente Álvaro Uribe propició en contra de un chocoano y afro. No es un partido incluyente, es sectario, es regionalista y racista".

La renuncia del militantes tiene origen en la campaña de desprestigio por partes de las élites del partido a la que estaba sometido el personero negro de Medellín, William Yeffer Vivas Lloreda, oriundo de Chocó, a quien Aguilar respaldaba.

Aguilar, quien se define como liberal, fue respaldado por usuarios de las redes sociales, que hablaron de racismo en el Centro Democrático y de desconocimiento de la realidad de Chocó, un departamento empobrecido, eminentemente negro.