El importante diario estadounidense The New York Times respaldó la afirmación del presidente Gustavo Petro según la cual un barco que navegaba desde Venezuela y que fue destruido por Estados Unidos a cohetazos en el Caribe llevaba ciudadanos colombianos.
En su edición digital de hoy, el diario neoyorquino sostiene que oficiales estadounidenses que pidieron no ser identificados porque no estaban autorizados a discutir públicamente el delicado as
unto, también dijeron que había colombianos a bordo de al menos uno de los barcos recientemente destruidos por Estados Unidos.
Petro dijo el miércoles que su gobierno creía que uno de los barcos recientemente bombardeados por Estados Unidos en su campaña contra presuntos narcotraficantes transportaba ciudadanos colombianos.
“Se ha abierto una nueva zona de guerra: el Caribe”, escribió Petro en su cuenta de la red social X. “Hay indicios de que el último barco bombardeado era colombiano, con ciudadanos colombianos a bordo (…) Espero que sus familiares se presenten y presenten una denuncia”.
Aunque Petro no aportó pruebas, la versión del diario le otorga la razón.
El gobierno de Trump sostiene que está atacando barcos y matando a sus ocupantes porque están contrabandeando drogas desde Venezuela a Estados Unidos, y pidió a Petro rectificar sus palabras.
Según el diario estadounidense, el ejército estadounidense ha lanzado al menos cuatro ataques letales contra embarcaciones civiles en el Caribe desde principios de septiembre, con un saldo de 21 muertos.
El gobierno de Trump ha caracterizado su despliegue militar en el mar Caribe como un objetivo contra Venezuela y su líder autoritario, Nicolás Maduro, a quien ha acusado de liderar una organización terrorista que está inundando Estados Unidos de drogas.
Esta es la primera vez que otro país afirma que sus ciudadanos murieron en los ataques.
La mayor parte de la cocaína en la región proviene de Colombia, según las Naciones Unidas, mientras que el fentanilo, que causa muchas más muertes por sobredosis, se produce en México. Analistas legales han calificado de ilegales los ataques a las embarcaciones. Y Maduro ha afirmado que el verdadero objetivo de la campaña parece ser su derrocamiento.
“Petro, un líder izquierdista que se acerca al final de su mandato de cuatro años, ha sido un crítico abierto de la campaña militar del presidente Trump en la región”, escribió el Times.
Según Trump, las personas fallecidas en los recientes ataques eran narcotraficantes, pero no ha aportado pruebas ni ha dado al público una base legal clara para los ataques ilegales que él pordenó.
En el caso de las dos primeras embarcaciones, la administración Trump identificó a los fallecidos como venezolanos. No ha identificado la nacionalidad de las personas fallecidas en los otros dos ataques.
Tras el anuncio de Petro, la Casa Blanca denunció sus comentarios como "infundados" y "reprensibles" y trató de presionar al líder colombiano para que se retractara, según un funcionario de la Casa Blanca que no estaba autorizado a hablar públicamente sobre un asunto de seguridad.
El funcionario dijo que una retractación permitiría a las dos naciones volver a centrarse en fortalecer su relación, un aparente reconocimiento de que la declaración de Petro corría el riesgo de tensar los lazos bilaterales entre Estados Unidos y Colombia.
De acuerdo con Pero, la operación en el Caribe es una excusa de los gobiernos de “extrema derecha”. En Nueva York aseguró que su justificación no era real. “Dicen que los misiles en el Caribe eran para detener las drogas. Mentira”, afirmó.
“No quieren que se haga luz en la América Latina y llegue de nuevo la hora de los pueblos. Los jóvenes asesinados con misiles en el Caribe no eran del Tren de Aragua —que nadie, quizás, conozca aquí su nombre— ni de Hamás, eran caribeños, posiblemente colombianos”, agregó allí.