Con alcaldes como Jorge Enrique Acevedo Peñaloza no hay por qué preocuparse. Absilutamente de nada.
Ni siquiera en Cúcuta, la quinta ciudad del país, acorralada por la guerra subvsersiva y narcotraficante, bajo toque de queda y refugio de miles de personas bajadas de Catatumbo.
Para Acevedo, una situación dramática como esa es un simple retozo democrático.
Por eso, prefirió irse de paseo a Barranquilla y de concierto, egún lo denunció el semanario Cambio Colombia.
Para él, Shakira vale más que el millón largo de cucuteños sometidos al terror.
En la madrigada del jueves, 20 de febrero, el país despertó con la noticia de que la Policía Metropolitana había reportado la activación de un carro bomba en el peaje del municipio de Villa del Rosario, ubicado en la autopista que comunica a Cúcuta con el puente internacional Simón Bolívar, la principal vía terrestre entre Colombia y Venezuela.
En medio de toda esa situación, se decretó el toque de queda en Cúcuta desde las 7:00 de la noche del jueves, 20 de febrero, a las 6:00 de la mañana del viernes, 21 de febrero. Mientras los cucuteños no podían salir de su casa, ¿dónde estaba el alcalde Acevedo?
Un video publicado en su cuenta de Instagram lo muestra reunido con el alcalde de Barranquilla, Alejandro Char. “Aprendiendo de los que saben. A pesar de las adversidades, le seguiremos apostando a que Cúcuta sea una ciudad de destino”, escribió el viajero en su cuenta.
Desde luego, Acevedo encontró respuesta.
“La coyuntura que se está viviendo en Cúcuta no se va a solucionar con un alcalde que mientras el municipio pasa por un momento difícil en temas de seguridad, se va a un concierto de Shakira en Barranquilla. Jorge Acevedo, los cucuteños esperan más de usted, necesitan un dirigente que ponga orden en el territorio, articule esfuerzos con el Gobierno Nacional, y cumpla todas esas promesas que hizo durante la campaña”, dijo en su cuenta de X el concejal opositor Leonardo Jácome.
Con esa posición coinciden varias voces en la ciudad que le piden respuesta al alcalde Jorge Acevedo claridad sobre dónde estaba en la noche del jueves.